Olmedo ‘La Villa de los siete sietes’

Olmedo en la provincia de Valladolid debe su nombre a la abundancia de olmos que existían en sus tierras. Se la conocía en sus tiempos nobles por ser la tierra de los ‘siete sietes’: por sus siete iglesias y siete conventos, siete plazas y siete fuentes, siete entradas a través de siete arcos, siete pueblos y siete casas nobles. Pero sobre todo habrán oído hablar de esta tierra por la obra teatral del escritor Lope de Vega, “El Caballero de Olmedo”.

 En las páginas de la obra teatral de Lope se relatan los amores de Don Alonso y Doña Inés, quien no quiere casarse con el elegido por su padre, finge meterse a religiosa para dejarse seducir por el caballero de Olmedo. Don Alonso salva la vida del prometido de Doña Inés. Como agradecimiento decide asesinar al Caballero de Olmedo. Y de ahí la famosa coplilla: “Que de noche le mataron /al caballero/la gala de Medina/la flor de Olmedo”. 

La historia de Olmedo está vinculada a importantes acontecimientos bélicos. El propio refranero popular recuerda “quien señor de Castilla quiera ser, a Olmedo de su parte ha de tener”. De su pasado conserva aquel ambiente medieval y un gran patrimonio monumental.

Ruta del mudéjar vallisoletano

A partir del reinado de Alfonso VIII se comienzan a construir numerosas parroquias de estilo románico-mudéjar, convirtiéndose en la v capital de lo que ahora se ha venido en llamar "Ruta del mudéjar vallisoletano". Está situada en plena "Tierra de Pinares", que conserva muchas muestras de este estilo.

Merece la pena recorrer diferentes lugares característicos de Olmedo.

El Parque Temático del Mudéjar es una iniciativa financiada por la Unión Europea, la Junta de Castilla y León, el Ayuntamiento de Olmedo y algunas empresas privadas. Se abrió en mayo de 1999 y ocupa una extensión de casi 10.000 metros cuadrados.

Situado en una ladera, cerca de la muralla, reúne una colección de maquetas de monumentos del mudéjar castellano y leonés. El material es el auténtico y original como ladrillos, piedra, cal. Todo se reproduce perfectamente a escala. Allí podremos ver veinte réplicas arquitectónicas a escala 1:8 como la Lugareja (Ávila), el castillo de Coca, y las iglesias vallisoletanas de Pozáldez, San Andrés de Olmedo, Fresno el Viejo, Muriel de Zapardiel o San Pedro de Alcazarén.

Los amantes de la botánica encontrarán más de 300 plantas. Las acuáticas y palustres vienen representadas por el lirio espadañal, nenúfar, puros sombrillitas; las coníferas por el pino piñonero, el ciprés, tejo, cedro y enebro; los arbustos con el tomillo, romero, albahaca y un largo etcétera. Los más pequeños encontrarán diversión en la zona recreativa y en los recorridos de ferrocarril.

Muchas son las transformaciones se han realizado en la Iglesia de Santa María del Castillo. Testigo de ello pueden verse restos en el exterior del edificio, desde su portada románica del siglo XII, pasando por la mudéjar del XV hasta la actual gótica del XVI. Decora su interior un retablo del XVI del ensamblador Gaspar de Tordesillas. La sillería que flanquea el retablo es del siglo XV, procede del convento de la Mejorada y la mesa de altar barroca tiene motivos decorativos masónicos. El relicario, debajo del coro, tiene forma de cajonería del siglo XVI con 49 bustos con reliquias en el interior de cada escultura; fue donado por el monarca Felipe II al convento de la Mejorada. Torre del Reloj y Palacio de la  Chancillería es la actual sala de exposiciones y biblioteca. Albergó la Real Chancillería de Valladolid cuando se produjo la peste en el siglo XVI. Anteriormente fue la sede de la Audiencia Real. Hasta hace unos años la Casa de la Villa era el Ayuntamiento de Olmedo. El Monasterio de la Madre de Dios se fundó en el siglo XV. Las dominicanas permanecen en el templo desde que se fundara.

La iglesia de San Andrés ha sido declarada Monumento Histórico Artístico Nacional. Los mudéjares, musulmanes que vivían en territorios conquistados por cristianos, fueron los encargados de su construcción. De este modo se dio origen a un arte que al comienzo seguía las bases del arte románico pero que luego dio lugar a un nuevo estilo artístico. Menéndez Pelayo dijo que era el “único tipo de construcción peculiarmente español de que podemos envanecernos”. La iglesia, de una sola nave, tiene la portada rematada por una cabecera semicircular que en el exterior forma un ábside que sigue las trazas de mudéjar castellano. La decoración es sencilla. Los ladrillos en vertical y horizontal rompen la monotonía y la triple arquería ciega está realizada con arcos de medio punto. La Torres de dos cuerpos está hecha de ladrillo y hormigón. No podemos olvidar el viejo olmo, “la Olma” que preside la plaza de San Andrés.  

El arco de San Miguel que se abre ante las murallas dan buena muestra del esplendor del pasado. La repoblación al sur del territorio se conoció durante la época medieval como Extremadura duriense a través de las comunidades de Villa y Tierra. Es en esta época cuando se amurallaron las cabeceras de estas comunidades y cuando Olmedo recibe la denominación de villa de los siete sietes. La iglesia de San Miguel es la mayor joya artística mudéjar de Olmedo. Dentro de la nave puede verse un magnífico sepulcro donde conviven la cultura islámica, judía y cristiana. A continuación destacamos un retablo plateresco atribuido a Gaspar de Tordesillas. En medio de la nave central hay dos colosales esculturas de San Joaquín y Santa Ana del siglo XVIII. En el presbítero, un retablo barroco también del XVIII de Andrés Hernando. Las escaleras bajo el altar conducen a la Cripta de la Virgen de la Soterraña, lugar escogido para la patrona de Olmedo y su comunidad de Villa y Tierra. En el centro un retablo del XVIII presidido por una escultura del XIII de la Virgen de la Soterraña.

El Convento de Nuestra Señora de la Merced calzada es la actual casa consistorial. La nave de la antigua iglesia está cubierta con yeserías barrocas obra probablemente de Alberto de Churriguera. Otros lugares dignos de visitar son la iglesia de la trinidad, hoy sala de cine; la iglesia de San Juan; la Casa de los Ortega, Casa de los Trocha o casa del Pósito.

Dónde comer

Casas de Turismo Rural Las Cavas
C/ La Cava, 2-4
630 037 76