FILMOLITOS (XXVIII)

FARGO (Serie de TV -  Primera Temporada - 2014)

FARGO es el abigarrado y complejo mundo de los COEN (ejercen de productores) en estado casi puro: El humor negrísimo, la violencia a ráfagas, el absurdo de la existencia, la casualidad disfrazada de Destino, la profundidad irresoluble de los dilemas morales, la referencia mítica al Dios bíblico, el lúcido pesimismo metafísico sobre la irredenta condición humana, la redención, en cambio, como dolorosa monotonía inercial, la corrupción de la mirada inocente, la caída en el tiempo voraz como castigo a las ilusorias pretensiones de eternidad, la pulsión de Muerte ejerciendo su trabajo implacable, la presencia de lo ominoso como el lobo (lo animal como raíz última y fundamento oscuro de lo civilizador) agazapado tras el velo aparentemente tranquilo de lo cotidiano, la quimérica felicidad a la cual parece oponerse todo el (des)orden del entero universo, la sutil y acerada crítica sociológica (esa mórbida cultura del “éxito a cualquier precio” materializada en diferentes y alienantes contextos laborales), y lo, en definitiva, trágico más, por supuesto, lo inevitablemente cómico que anida en el seno mismo del horror. Una serie extraordinaria y absorbente, con una dirección por momentos memorable y unas interpretaciones soberbias, magníficas, entre las que destaca obviamente la del gran BILLY BOB THORTON (su asesino observador e irónico se queda para el recuerdo) y también el imponente trabajo de un MARTIN FREEMAN (perfecto su Lester Nygaard) que hace evolucionar a su personaje a través de un viaje hacia los pliegues más sombríos del alma humana. Lo que ya nos señalara Emil CIORAN en su “Breviario de podredumbre” al afirmar que la “realidad es un producto de nuestros excesos, de nuestras desmesuras y de nuestros desórdenes”, cobra aritmética comprobación en esta obra dolorosa, alucinada y salvaje. Imprescindible.

THE KNICK de Steven Soderbergh (Serie de TV – Primera Temporada - 2014)

A veces el milagro se produce. Cada vez menos, pero ocurre. Y Soderbergh lo obra, lo alcanza, lo regala y nos ofrece una portentosa OBRA MAESTRA que no es serie ni película sino CINE AL 100% de pureza, inyectado en vena, adictivo, grandioso, monumental, experimental y clásico al mismo tiempo, plagado de aciertos visuales y hallazgos narrativos, dirigido todo de forma perfecta y magistral por una artista pletórico en plena posesión de todos sus recursos, casi inagotables, que alcanza cimas expresivas no vistas en mucho tiempo, con ardor y valentía, con fervor de creyente en la imagen que transmite ficción y verdad, con el alma puesta en cada plano, en cada secuencia que zarandea y arrastra sin concesiones, en cada matiz y línea de diálogo siempre inteligente y con sentido dentro de una globalidad que apabulla en su conjunto y deslumbra en cada detalle. La mejor serie del año 2014 y, probablemente, de muchos años venideros, un elenco en estado de gracia (inconmensurable Clive Owen) y un demiurgo visionario que regala los bienes más preciados para el espectador sensible y activo, auténtico degustador del verdadero arte cinematográfico: Inteligencia, Emoción, y Verdad. GLORIOSO TRIUNFO DEL CINE, un poderosísimo instrumento para profundizar de forma compleja y arriesgada en realidades sociales y psicológicas que nos interpelan como sujetos instalados en un mundo amenazante e incierto. Grande, muy grande STEVEN SODERBERGH y esta imprescindible obra titulada THE KNICK.

EL PEOR EQUIPO DEL MUNDO de Mike Brett y Steve Jamison (2014)

Si crees haberlo visto todo en el mundo del Fútbol, te equivocas de punta a cabo, de cabo a rabo, de principio a fin, vamos, que deberías ver esta estupenda “El peor equipo del mundo” donde el deporte Rey, el noble arte balompédico, el sublime espectáculo del  esférico, el mítico territorio donde Dios es redondo y a veces arbitra nos hace contemplar con ojos atónitos y mirada ojiplática como un equipo (Samoa Americana) capaz de encajar 31 goles en un partido oficial contra Australia (el monto es correcto) consigue tras numerosos esfuerzos y sacrificios superar esa frustración inconmensurable hasta lograr la victoria más importante de todas, la del autorrespeto y la confianza propia, con la ayuda del experimentado entrenador holandés Thomas Rongen, y a través obviamente del juego del balón en otra fase clasificatoria (Mundial 2014) de corto recorrido: Tres vitales encuentros disputados a cara de perro, paramentados con la dialéctica del heroísmo, enfrentados con la desesperación del naufragio y, por supuesto, culminados con un desenlace memorable. ¿Por qué? Porque Fútbol es Fútbol. Grande.

A PROPÓSITO DE LLEWYN DAVIS de los Hnos. Coen (2013)

A propósito de una película excelente, de una dirección maravillosa, de unos intérpretes en estado de gracia, de una fotografía sublime, de una historia durísima, de una mirada propia e insobornable, de un compromiso total con el Cine, de las imágenes convertidas en Arte, de unos hermanos geniales, de un OSCAR ISAAC inmenso, de una descarnada elegía, de una cinta magistral. A propósito de todo ello, oye, ni se te ocurra perdértela. Muy Grande.

TRES BODAS DE  MÁS de Javier Ruiz Caldera (2013)

No, no es “8 apellidos vascos”, afortunadamente, porque esta es una comedia muy superior, bien construida, con una labor de dirección apreciable y un guión que, si bien desfallece en su tramo final, ofrece momentos de una hilaridad arrebatadora. Con algún imperdonable error de casting (el becario), destacan sobremanera los impecables trabajos de Inma Cuesta y un superlativo Quim Gutiérrez en la que sin duda es una comedia que hubiera merecido mucha mayor atención de ciertos medios, esos que incomprensiblemente dieron pábulo a una bobada sin gracia de horrorosa dirección y guión bochornoso. Solo por contraste con aquella bazofia infumable, esta “3 bodas de más” merece nuestro amoroso plácet.

HOLMES & WATSON. MADRID DAYS de José Luis Garci (2012)

Aprecio la personalidad de Garci y, por supuesto, su Cine, que es aquí lo que verdaderamente importa, pero mal crítico sería si mis preferencias me nublaran el juicio frente a una película tan mala como la que por desgracia nos ocupa. Dice Garci que usó el “mcguffin” del Destripador para (des)ubicar a Holmes en el Madrid finisecular de Galdós y Albéniz, y yo digo que toda la insufrible cinta es un burdo truco que se permite el gran cineasta para sentar cátedra sobre todo lo divino y lo humano que se le pasa por las mientes, especialmente el mal, la corrupción, el amor, la amistad, los garbanzos, las porras, las morcillas, los toros y el progreso. Pero una cosa es estar más o menos sembrado al emitir juicios sobre algunos de esos temas, o al menos ocurrente, y otra muy distinta fabricar un abominable dislate para meterse uno mismo con calzador y generar una obra que oscila entre lo ridículo y lo pretencioso, ofreciendo una buena dosis de comicidad involuntaria y una vergüenza ajena que no se puede aguantar. En fin, que nuestro admirado Garci ha dicho que este es su definitivo testamento cinematográfico y, desde el profundo respeto que le profesamos, nos permitimos aconsejarle que por favor se lo tome muy en serio y no vuelva a perpetrar un desaguisado de tamaña magnitud. Si no se puede, pues no se puede y no debe hacerse. Lo de querer filmar un western como le hemos oído en algún comentario es una idea que debe abandonar desde ya mismo: En serio Garci, el Condemor, pecador de la pradera, no precisa ninguna secuela. ¡¡¡Penosa de cojHolmes!!!

THE NORMAL HEART de Ryan Murphy (2014)

Otra excelsa maravilla producida por la HBO. Es puro CINE, con un elenco impresionante, una dirección notabilísima y un guión prodigioso. THE NORMAL HEART es desgarradora, apabullante, compleja, sensible y nunca sensiblera, inteligente, bella y terrible al mismo tiempo y te exprime emocionalmente hasta dejarte literalmente extenuado. Una nueva OBRA MAESTRA que merecería su estreno en salas de cine porque ante todo, y más allá de todas sus calidades artísticas, que son todas, es una obra absolutamente NECESARIA. Impresionantes e inolvidables los dos trabajos de MARK RUFFALO (qué grandísimo actor) y MATT BOMER (ganador del Globo de Oro a mejor actor de reparto).

THE FALL (LA CAZA) de Allan Cubitt (Serie de TV – Desde  2013)

Inteligente, compleja, sombría, inquietante, cruda y, por supuesto, sin concesiones. Una obra perfecta que explora de forma casi entomológica los comportamientos más oscuros del animal humano. “The Fall” cuenta con una intriga absorbente, un trabajo actoral prodigioso (Gillian Anderson vs Jamie Dornan), y uno de esos finales en su segunda temporada de los que tanto deberían aprender excelentes series que acaban por traicionarse de forma vergonzosa, pero perfectamente explicable. Grande.

THE FAKE de Sang-jo Yeon (2013)

Violenta, cruda, oscura y profundamente pesimista, estamos sin duda ante una de las propuestas más potentes y arrolladoras de los últimos años, y es que ya estamos hasta las narices de tanta animación efectista, ruidosa y complaciente, por mucho disfraz falsamente subversivo que se gaste. THE FAKE es un ejemplo a seguir, sin contemplaciones, sin concesiones, con un final rotundamente demoledor. Y si no te atreves a verla o acaso eres incapaz de valorarla, merecerás la eterna condenación. Implacable.

SOLO DIOS PERDONA de Nicolas Winding Refn (2013)

Más abstracta y oscura que la sobrevalorada “Drive”, esta “Solo Dios perdona” abusa de la estética silente para ofrecer una espectáculo siniestro, al que me atrevo a calificar de “neononírico”, mezcla de neón y sueño, fabricado a base de un abigarrado onirismo estetizado al límite de lo soportable, y tal vez por ello inmensamente sugerente en su cadencioso estatismo, un habitáculo formal para contener un Edipo salvaje de bíblicas resonancias incrustado en el impasible rictus de Gosling. Solo por haber filmado lo que le dio la jodida gana, apruebo la sublimación de todos los tics del director perfectamente reconocibles en “Drive”, destilados aquí sin pudor y utilizados con la ironía de quien se sabe ensalzado o ninguneado por unas opiniones tan arbitrarias y artificiosas como aquello que dicen criticar.